Bueno, bueno, ya era hora de que los barrancos tuviesen agua, muchos de ellos además muy cargados. En esta ocasión hemos ido con un grupo de chavales/as de San Juan. En total 15.
Los más habituales han sido las gemelas (Alba y Olga), Brais, José Antonio y Vicente, el resto eran nuevos, pero igual de majos.
Preparar todo el material para los 15 fue largo pero divertido. Una vez arreglado el lío nos pusimos en marcha hasta la cabecera del barranco. No es muy larga pero ya nos hace sudar. El día es fantástico.
Una vez en el barranco y probada el agua, además de dulce estaba muy fría, llegamos al primer rapel, con agua es el único abligado siendo el resto saltos muy bonitos.
Perfecto, todos pasaron sin problemas. Pero lo más divertido fue cuando llegamos a los saltos. La primera impresión fue que era imposible no darse contra la pared, pero tras la perfecta demostración de Vincent (uno de los monitores), el resto se animó y todos saltaron.
Más chungo estuvo el el segundo salto, el más largo, impresiona algo más y unos cuantos decidieron que era demasiado y rapelaron. Dimos los mismos ánimos a todos. En ese salto estuve tomando fotos de todos, con un resultado espectacular ¿Queréis ver alguna de las fotos? Aquí estan.
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